lunes, 24 de julio de 2017

LA VENTANA SENTIMENTAL N° 2



                    UN ROMANCE FUGAZ RUMBO A VALPARAISO



A mediado del mes de febrero, había concluidos mis vacaciones de verano y debía regresar a la escuela de ingeniería naval. Ubicada en la ciudad de viña del mar. A continuar con mi estudio de electricidad y refrigeración, y a la vez poder juntarme con mi novia, a quien no veía desde hace tres semanas, la extrañaba y  la echaba mucho de menos y me esperaba en la ciudad de Valparaíso.Sábado por la tarde, en el cielo estaban apareciendo las nubes de color rojizo en dirección hacia el mar, indicaban que pronto llegaría el ocaso, de una tarde bastante cálida, hermosa y especial. Llego al terminal de buses de Talcahuano, a tomar el bus con destino a Valparaíso. Me subo al bus y según mi boleto número 35, me  correspondía al centro, lado de la ventana, acomodo mi asiento, cuando de pronto miro atraves de la ventana, hacia la calle, había un grupo de jóvenes que estaban despidiendo a una hermosa dama, bastante atractiva y además tenía un muy buen parecido a mi novia. Lo que hiso que le pusiera más atención.Sube esta hermosa mujer al bus y pasa por mi sector y se detiene frente a mi asiento, por unos instante pensé, que sería mi acompañante de viaje, en el asiento del lado, pero no fue así, miro a través de la ventana y comenzó a despedirse de sus amistades. De pronto me pide que le facilite mi gorra de marinero y con ella hace un gestó de saludos y despedida y a la vez se acerca muy junto a mí, de una manera alegre, jovial y muy espontanea, haciéndole creer a sus amistades que había encontrado su acompañante de viaje. Además, al sentir su aroma, su perfume que me cautivo y me dejo embriagado y por unos instante me hiso trasportarme al paraíso, aun lugar encantado lleno de pasión, placer y lujuria. Termino de volver a mi realidad, cuando me dice gracias eres muy simpático y se aleja de mi lado, no le pregunte su nombre, que pena, pero para mí serás,dama del atardecer, así deberé llamarte, pues tu nombre no lo se.Se sienta tres asientos delante de mí, en la corrida de asiento del lado izquierdo, sector ventana. El bus comienza a moverse con destino al terminal de buses collao, en donde se completaría la dotación. Ya que en ese momentos éramos los únicos pasajeros a bordo. Llegamos al terminal de buses, con gran afluencia de público, los buses entran y salen a diferente destino. El bus se estaciona en el andén número 18, se abren las puertas y comienzan a subir los pasajeros, se acomodan en  sus asientos, guardan sus  pertenencias en la parte alta, y su equipaje principal en el portamaletas, los guardaba el auxiliar. A su vez miraba de reojo hacia afuera y la subida del bus, contemplando, quien sería mi acompañante de viaje por espacio de diez horas, rumbo a pancho gancho. De pronto aparece una señora mayor, busco el número 34, le respondo este que está a mi lado, se sienta y comienza a buscarme conversa. Y resulto ser bastante agradable y muy amena su conversación por tener varios temas en común, su esposo había sido marino,habia estudiado en la escuela de ingeniería naval, y  navegado en la esmeralda y por diferentes buques y además vivía en el cerro playa ancha, lugar en donde vive mi novia, y  conocía muy bien los términos marineros.Habíamos recorridos como tres horas de viaje y me dirijo al baño, estaba cerrado, espere unos minutos y seguía cerrado. Siento ruido del otro lado como si alguien golpeaba, pongo más oído y efectivamente alguien estaba encerrado. Me dirijo a la cabina del conductor y le aviso al auxiliar, regreso de vuelta al baño y al pasar frente al asiento de la dama del atardecer, esta me mira y me regala una tierna sonrisa. Le respondo de igual manera y siento una sensación especial hacia esta bella dama.El auxiliar llega al baño y con una llave maestra abre el baño y había un niño de 12 años que se le había atascado el pestillo. Ingreso al baño y hago mis necesidades fisiológicas y regreso a mi asiento y mi compañera de viaje estaba durmiendo y a ratos roncaba, lo que me impedía conciliar el sueño. De pronto se encienden las luces y el bus detiene su marcha, frente a una hostería que es la parada programada y el auxiliar avisa a los pasajeros que disponen de 45 minutos para bajar del bus y tomarse algún refrigerio o comer algo al interior de la hosterías. En este lugar, donde se puede  conocer un poco más a tus vecinos de viajes, puedes ver mejor sus rostros, observando su forma de ser más aun cuando uno viaja solo. No tienes a quien poderle platicar y tus pensamientos comienzan a fluir y viajar a diferentes partes y lugares.Siento apetito e ingreso al interior de la hostería, estaba llena, prácticamente todas las mesas ocupadas. Producto de las diferentes líneas de buses que entran, salen y siguen con su recorrido a diferentes lugares del país.En una de las mesas del centro logro ubicar a los conductores y auxiliar, quienes están comiendo una contundente comida, cargando de energía para continuar el viaje, además en este lugar se realiza el cambio de conductor. En otra mesa estaba el niño que había quedado encerrado en el baño, feliz compartiendo  juntos a sus padres y hermanos.Además me sentía muy observado y que me miraran con cierta simpatía, quizás por andar vestido de marinero y de estar muy lejos del mar y de mi buque de guerra. O por mi forma de ser y simpatía que proyectaba. Al interior del local, alguien me hace señas y que me acerque a ese lugar, para mi gran sorpresa era la dama del atardecer quien me dice muy amablemente si quiero compartir su mesa hay un asiento dispononible.Por  supuesto le dije y me senté a su lado y pedí un sándwich y un café, lo mismo que se estaba sirviendo. Para romper el hielo y entrar un poco más en confianza, le pregunto su nombre, que para mí hasta ese momento era la dama del atardecer. Me responde con una voz desinhibida y muy cálida  que se llama Alejandra, le respondo mi nombre es Enrique.Posteriormente nos contamos partes de nuestras vidas, en este tan corto periodo de tiempo y quizás lo más importante que nos dijimos fue que ambos estábamos comprometidos y teníamos compromiso pendientes en la ciudad de Valparaíso.Llega el momento de abordar nuevamente el bus y me dirijo a mi asiento a tratar de dormir, pero no podía, tenía  tantos pensamientos en mi mente que me lo impedían  y Alejandra era partes de un de ellos.                                                                                 
Había pasados un par de horas, decido ir nuevamente al baño, todos dormían plácidamente, las luces estaban apagadas y solamente encendidas las de policía, del pasillo. Llego al baño este se encuentra cerrado, espero un momento, se abre la puerta y aparece Alejandra y me mira con sus lindos tiernos ojos negros y me sonríe el bus comienza a moverse y a tambalearse para ambos lados, resbala y cae sobre mí, la abrazo para sujetarla y no dejarla caer y en ese instante siento nuevamente con mas ímpetu su perfume, su aroma a dulce primavera y a roció de verano. Y su largo pelo negro azabache que cae sobre mi rostro como una tierna enredadera. Nos reímos, y a la vez nos miramos fijamente a nuestros ojos, es muy linda y hermosa, los segundos se hacían eternos y no pude resistir esta magia y tentación que se apoderaba de mí. La estrecho entre mis brazos la beso con toda mi locura y pasión, no me rechaza y me responde efusivamente con más ganas, sus beso son muy ardientes, me queman, son como caramelos, me hacen llegar al cielo, son los que me dan el placer.Estuvimos así por un tiempo bastante prolongado, hasta que de pronto se retira de mi lado y me dice esto no puede ser. Regreso nuevamente a mi asiento y a meditar todo lo que me estaba pasando, no lo podía creer, me sentía un poco culpable por mi desliz hacia mi novia. Pero había algo más profundo que me tenía hipnotizado y me decía: continúa con lo que estás haciendo, disfruta el bello momento que estás viviendo.Había logrado dormir un poco, cuando de pronto se encienden las luces y el auxiliar nos informa que el bus se tendrá que detener por un desperfecto mecánico, frente a una bomba de bencina por un tiempo indeterminado. Desciendo del bus, comienzo a tomar aire fresco y a estirar un poco las piernas que las tenían adormecidas. Y ubicar a Alejandra, que al momento de bajar no la ubique en su asiento. Me dirijo hacia una cafetería que había cerca de ese lugar y me encuentro con Alejandra, quien se estaba sirviendo un café, me siento a su lado y pido un café, la siento un poco preocupada pero a la ves contenta de que este a su lado y no me quita la vista de encima. De pronto me dice necesito conversar a solas contigo, perfecto le dije, salgamos afuera y nos fumamos un cigarrillo y hablamos. Salimos al exterior del local y por suerte nuestra, había una pequeña placita con un par de asientos en donde nos sentamos, bajo la luz de unos antiguos faroles que nos cubrían y eran testigos de este romance muy especial en esta noche mágica de ensueños. Le pregunto qué le pasa, me responde que esta confundida y no sabe que pensar, le encantaron mis besos, eres una persona muy simpático, romántico, apasionado y muy especial. Por qué no tuve la oportunidad de conocerte  antes. Si ahora estoy comprometida y no me parece bien lo que estoy haciendo. Te entiendo a mi pasa algo parecido, pero decirte que tus besos de fuego, tú forma de ser, me conquistaron, eres muy amorosa y apasionada, estarás siempre en mis recuerdos y un rinconcito de mi corazón. Comenzamos a despedirnos, nos tomamos las manos y como algo mágico y muy espontaneo de ambas partes, nos abrazamos y comenzamos a besarnos, con más ganas y mucha pasión y solo atinaba a decirme aprovechemos este gran momentos que es nuestro y único.
Perdimos la noción del tiempo, era una noche encantadora, especial, llena de amor, pasión y locura y deseaba que estos momentos no terminaran nunca jamas.Pero lamentablemente no fue así, llegó de pronto el auxiliar del bus, quien nos buscaba y nos dijo, el bus esta por partir y ustedes son las últimas personas que faltan. Subimos al bus y cada uno tomo su asiento por separado y el bus continuo con su recorrido hacia la quinta región. Al interior se sentía una quietud y un silencio total quizás por el cansancio acumulado, agotador del viaje y por el imprevisto mecánico sufrido, que hiso  que la llegada se retrasara a un más de habitual. A lo lejos se escuchaba  un pito de la alarma cuando el bus excedía la velocidad permitida.Pero de repente se escuchan unos gritos desgarradores de un joven que estaba sentado en el asiento posterior, junto a su polola y decía: nadie puede conmigo, nadie me vencerá, déjenme tranquilo y tiraba manotazos por todos lados, pasando a golpear a su polola. Cálmate Luis, despierta le decía su polola y lo contenía, está todo bien, Luis responde tuve una pesadilla, un terrible sueño que no me dejaba despertar.Todos los pasajeros habían despertados, se encendieron las luces, las personas murmuraban y no sabían que había pasado, cual había sido el problema. El auxiliar informa que un pasajero tuvo una pesadilla, un mal sueño y que todo está bien.Y no faltaron los graciosos que comenzaron a gritar tallas y hacer chiste de lo ocurrido, diciendo: déjate ver por un psicólogo, sufres delirio de persecución, estas mirando muchas películas de terror, yo soy himan tengo el poder. Se desato una risa generalizada, rompiendo la monotonía del momento al interior del bus, pero en cambio Luis se sentía avergonzado y cohibido y derramo más de par de lágrimas que por suerte su polola que estaba a su lado lo logro consolar.Después de este percance tragicómico y continuar con el viaje, por fin logramos llegar al terminal rodoviario de Valparaíso. Las personas comienzan a bajar del bus, me dirijo al baño a mojarme la cara y arreglar mi uniforme. Cuando de pronto al salir del baño, miro atraves de la ventana y logro divisar a mi novia conversando con Alejandra muy amistosamente, quede anonadado, en ascua, se conocen que chico es el mundo me dije. Que hago ahora, no puedo bajar y sin saber cuál sería la reacción de Alejandra y que cara pondría yo al mirar a mi novia. Espere unos minutos y por suerte me salvo la campana, se acerca un joven, la abraza, la besa y se alejan felizmente del terminal.Desciendo del bus más tranquilo, abrazo a mi novia y la beso, me pregunta como estuvo el viaje, le respondo bastante agotador. Sabes me dice, hace un instante estuve conversando con Alejandra, una ex compañera de la universidad, y que tiene un parecido a mí, venia en el mismo bus, te acuerdas haberla visto. Le respondí que no, con  una mentira piadosa, que me vine casi todo el trayecto durmiendo. Procedo a retirar mi equipaje y el auxiliar me mira y se sonríe, me dice hasta pronto, fue testigo clave de mi romance ilegal. Abrazo a mi novia, tomo mi equipaje y nos retiramos del terminal en dirección a su domicilio. Con respecto Alejandra, esta fue la última vez que logre verla y contemplarla. Ahora forma parte de mi pasado y de un hermoso y apasionado romance fugaz.


                                        EL IMPARCIAL


NOTA:
AMIGAS Y AMIGOS, QUE SIGUEN MI BLOGS CON MIS HISTORIAS Y DESVENTURAS  DE LA VIDA. ME GUSTARIA QUE ME DIERAN SU OPINION O ALGUN  COMENTARIO AL RESPECTO……GRACIAS

Publicadas por carlos enrique herrera parra a la/s 13:11 


1 comentario:

Manuel dijo...

Excelente historia..